El Estrés y el síndrome de intestino irritable (SII) o “Colon Irritable” están estrechamente relacionados, y hay numerosas investigaciones científicas que respaldan esta conexión. El SII es un trastorno funcional gastrointestinal que afecta aproximadamente al 30% de la población mundial, siendo más común en mujeres y en países en vías de desarrollo, en Chile al menos el 20% de la población lo padece.
El estrés juega un papel crucial en la génesis y severidad de los síntomas del SII. Cuando un médico habla con personas que padecen este trastorno digestivo, “lo que se encuentra” es que alrededor del 60% de los pacientes con SII refieren y cumplen criterios para uno o más eventos calificables como estresores, siendo el más común la Ansiedad.
Independientemente de si tienen SII o no, las personas con ansiedad tienden a preocuparse en exceso por temas como la salud, el dinero o el trabajo. La ansiedad puede provocar diferentes síntomas como malestar estomacal, dolor abdominal, temblores, dolores musculares, insomnio, mareos e irritabilidad.
Aunque los problemas emocionales como la ansiedad u otros trastornos psicológicos no causan el trastorno digestivo de por sí, las personas con SII si pueden ser más sensibles a los problemas emocionales. Emociones fuertes como el estrés, la ansiedad y la depresión desencadenan sustancias químicas en el cerebro que activan señales de dolor en el intestino, lo que puede hacer que el colon reaccione, haciendo que la mente sea más consciente de los espasmos en el colon.
Como es ya sabido el tratamiento del SII puede ser complejo debido a su naturaleza multifactorial, sin embargo, existen varias opciones que han demostrado ser efectivas como, por ejemplo: modificaciones en la alimentación, tratamiento farmacológico que pueden ayudar a controlar los síntomas, además de dosis bajas de antidepresivos. Dentro de este amplio espectro existe un tratamiento accesible y ampliamente utilizado, las capsulas de Menta Piperita (Peppermint Oil), efectivas en el alivio de las molestias asociadas al SII, especialmente en la gestión del dolor cuando se sigue el tratamiento durante más de dos semanas, actualmente disponibles en Chile.
Hoy en día no es extraño acompañar el tratamiento del SII con distintas terapias complementarias, reconociendo al estrés como un factor importante, por lo que las terapias psicológicas cognitivo-conductual (TCC), Hipnosis y Mindfulness no son inusuales.
Practica la respiración profunda; tómate un momento para inspirar, exhalar y resetéate.